El collar de rubíes y diamantes es mucho más que un accesorio: es una joya que cuenta historias, une generaciones y simboliza sentimientos eternos.

El universo de la joyería ha sido siempre un reflejo de poder, elegancia y significado. Entre todas las piezas que despiertan admiración, el collar de rubíes y diamantes ocupa un lugar privilegiado. Se trata de una creación que combina la intensidad del rubí con la luminosidad del diamante, dos piedras preciosas que juntas narran historias de pasión, amor eterno y sofisticación.

En Joyería Murguía, con más de un siglo de trayectoria en Lima, este tipo de joya se trabaja con la perfección que solo la experiencia y la tradición pueden garantizar. A lo largo de esta redacción descubrirá qué hace tan especial a un collar de rubíes y diamantes, cuál es su valor simbólico, cómo se eligen las piedras y por qué es considerado una de las piezas más deseadas en la joyería fina.

El encanto atemporal del rubí

El rubí, conocido como “la piedra del sol” o “la piedra de los reyes”, es un mineral perteneciente a la familia del corindón. Su tonalidad roja, que puede variar desde un escarlata intenso hasta un rojo púrpura, ha sido símbolo de amor, poder y prosperidad desde la antigüedad.

Un collar de rubíes y diamantes refleja este magnetismo, pues cada rubí aporta una carga emocional y visual única. No es casualidad que en culturas antiguas se creyera que esta piedra protegía a los guerreros en combate y simbolizaba la fuerza vital del corazón.

La luz eterna del diamante

El diamante, por otro lado, es la gema más codiciada del mundo. Su brillo, resistencia y pureza lo convierten en un referente de eternidad. Cuando se combina con el rojo del rubí, el contraste genera un efecto visual poderoso: pasión y luminosidad unidas en una sola pieza.

Por esta razón, un collar de rubíes y diamantes no solo es un accesorio de lujo, sino también un símbolo de unión y equilibrio.

Historia y tradición de los collares con rubíes y diamantes

Los primeros collares de rubíes engarzados en oro se remontan a las cortes de Asia, especialmente en Birmania (actual Myanmar), considerada la cuna de los rubíes más valiosos. Con el paso de los siglos, estas piezas llegaron a Europa, donde se convirtieron en emblemas de realeza.

La incorporación de diamantes a estos diseños fue la evolución natural: la combinación del rojo ardiente con el brillo blanco dio lugar a una joya que simboliza poder y sofisticación. En el siglo XIX, los collares de rubíes y diamantes ya eran parte de las colecciones de reinas y nobles, reforzando su estatus como piezas exclusivas de alta joyería.

¿Qué significa regalar un collar de rubíes y diamantes?

Un obsequio de esta magnitud no es simplemente un detalle material. Cada piedra aporta un mensaje:

·         Rubí: representa la pasión, el amor profundo y la vitalidad.

·         Diamante: simboliza la eternidad, la fidelidad y la pureza.

Por lo tanto, regalar un collar de rubíes y diamantes es una declaración de sentimientos perdurables, un gesto que trasciende modas y épocas. Es la joya ideal para aniversarios, fechas especiales o como legado familiar.

Diseño y estilos de un collar de rubíes y diamantes

Un collar de rubíes y diamantes puede adaptarse a diferentes estilos según la ocasión y el gusto personal:

1. Collar tipo rivière

Se caracteriza por una hilera de rubíes y diamantes distribuidos de manera uniforme. Es ideal para eventos de gala.

2. Collar con colgante central

Un diseño donde un gran rubí central se rodea de diamantes, destacando como pieza principal.

3. Collar de diseño contemporáneo

Incluye formas asimétricas o combinaciones con oro blanco o amarillo de 18 quilates, pensado para mujeres que buscan modernidad sin perder la esencia de la joya fina.

4. Estilo vintage

Inspirados en piezas antiguas, suelen incorporar detalles grabados y engastes elaborados que evocan la joyería clásica.

¿Cómo elegir un collar de rubíes y diamantes?

Al momento de seleccionar una pieza tan especial, conviene tener en cuenta ciertos factores:

1.       Color y pureza del rubí: los más valorados son los de tono “sangre de paloma”, un rojo intenso con un toque púrpura.

2.       Calidad del diamante: se mide bajo los criterios de las 4C (color, corte, claridad y quilates).

3.       Engaste y metal: el oro de 18 quilates es la opción más segura y duradera.

4.       Diseño: debe adaptarse al estilo de la persona que lo llevará.

Un buen collar de rubíes y diamantes no solo destaca por la calidad de sus piedras, sino también por el trabajo artesanal que asegura resistencia y belleza a largo plazo.

El valor simbólico y patrimonial

Invertir en un collar de rubíes y diamantes es mucho más que adquirir una joya de lujo. Estas piezas suelen revalorizarse con el tiempo, sobre todo cuando las piedras cuentan con certificaciones internacionales que garantizan su autenticidad. Además, poseen un valor emocional incalculable, pues muchas veces se convierten en herencia para futuras generaciones.

Cuidados y conservación

Para mantener intacto el esplendor de un collar de rubíes y diamantes, se recomienda:

·         Guardarlo en un estuche individual para evitar rayones.

·         Limpiarlo con un paño suave y soluciones específicas para joyas finas.

·         Evitar la exposición a químicos agresivos o perfumes directos.

·         Realizar mantenimientos periódicos en joyerías especializadas como Murguía.

Murguía Joyería: tradición y excelencia

En Lima, Joyería Murguía se ha consolidado como un referente en la creación de piezas únicas que combinan tradición artesanal con diseños contemporáneos. Su experiencia de más de 100 años respalda cada collar de rubíes y diamantes que sale de su taller, garantizando calidad, autenticidad y un diseño que perdura en el tiempo.

Cada cliente recibe asesoría personalizada para elegir la joya que mejor se ajuste a sus deseos, ya sea como regalo, inversión o legado familiar.

El collar de rubíes y diamantes es mucho más que un accesorio: es una joya que cuenta historias, une generaciones y simboliza sentimientos eternos. Su belleza, combinada con la maestría de joyeros expertos como los de Murguía Joyería, lo convierte en una pieza que siempre destacará.